FIGURA ACROCANTHOSAURUS ( PAPO )
Referencia 55062
Dimensiones : 28.00 cm x 6.30 cm x 15.40 cm (Lxlxh)
PESO : 0.30 Kgs
Acrocanthosaurus atokensis ( lagarto de espinas altas de Atoka») es la única especie conocida del género extinto Acrocanthosaurus de dinosaurio terópodo alosauroide que existió a mediados del período Cretácico, hace aproximadamente entre 125 y 99,6 millones de años, durante el Albiense,1? en lo que hoy es Norteamérica. Sus restos fósiles han sido hallados en los estados de Oklahoma y Texas, mientras que dientes atribuidos a este género proceden de Maryland.
El acrocantosaurio era un depredador bípedo, y como el nombre indica, se lo conoce principalmente por sus apófisis espinosa, ubicadas en muchas de sus vértebras, y que parecen haber sostenido una «joroba» encima del cuello, espalda y caderas del animal. El acrocantosaurio fue uno de los terópodos más grandes, con unos 11,5 metros de largo, y un peso de hasta 5.7 toneladas.2? Grandes huellas fósiles descubiertas en Texas pudieron pertenecer al acrocantosaurio, aunque no se las ha asociado directamente con esqueletos.
Una serie de descubrimientos recientes han permitido clarificar muchos detalles de su anatomía, como también realizar estudios detallados de su estructura cerebral y la función de sus miembros delanteros. Sin embargo, persiste el debate sobre sus relaciones evolutivas, mientras que algunos científicos lo clasifican como un alosáurido, otros en cambio sostienen que es un carcarodontosáurido. El acrocantosaurio era el téropodo más grande de su ecosistema y posiblemente un superpredador que dio caza a grandes saurópodos y ornitópodos.
Aunque era más pequeño que su pariente el Giganotosaurus, el Acrocanthosaurus fue uno de los terópodos más grandes que han existido. El individuo más grande y completo que se ha descubierto, NCSM 14345 se estima que su longitud fue de 11,5 metros y con un peso estimado de 5,7 a 6,2 toneladas, con un rango máximo de 7,25 toneladas posibles para el espécimen2? 3? 4? 5?6? y su cráneo medía aproximadamente 1,3 metros de largo. 4?
El cráneo del acrocantosaurio, al igual que el de otros alosáuridos, era largo, bajo y estrecho. Un agujero en frente de su cuenca ocular conocido como fenestra anteorbital, le permitía reducir un tanto su peso, dicha abertura era muy grande y medía más de un cuarto de la longitud craneal y dos tercios de su altura. La superficie externa del maxilar y el lado superior del hueso nasal, justo al tope del hocico, no poseían una textura rugosa como en el giganotosaurio o el carcarodontosaurio. De los huesos nasales partían largos y cortos bordes que recorrían ambos lados del hocico hasta detrás de los ojos, donde continuaban sobre los huesos lagrimales.4? Esto es un rasgo característico de todos los alosauroides.7? A diferencia del alosaurio, no se presentaba una prominente cresta sobre el hueso lagrimal que se ubicaba frente a los ojos. Los huesos lagrimales y postorbitales se encuentran formando un arco superciliar encima del ojo, al igual que en los carcarodontosáuridos y los no relacionados abelisáuridos. Diecinueve dientes curvos y aserrados se insertaban a cada lado de la mandíbula superior, pero no se ha publicado aún la cantidad que hay en la mandíbula inferior. Los dientes del acrocantosaurio eran más anchos que los del carcarodontosaurio y no tenían la textura rugosa que distinguía a los carcarodontosáuridos. El dental fue cuadrado fuera del borde frontal, como en el giganotosaurio, y poco profundo, a diferencia del resto de la mandíbula que es muy profunda. El acrocantosaurio y el giganotosaurio poseen un grueso borde horizontal en el lado externo del hueso surangular de la mandíbula inferior, debajo de la articulación temporomandibular.4?
Ilustración de unos acrocantosaurios en movimiento.
Lo que más destaca al acrocantosaurio es su fila de altas espinas neurales que se localizan en las vértebras desde el cuello hasta el final de la cola, midiendo hasta 2,5 veces la altura de la vértebra.8? Otros dinosaurios también poseían espinas similares en su espalda, las de algunos siendo mucho más altas que las del acrocantosaurio, como por ejemplo, las del espinosaurio, las cuales medían casi 2 metros de altura y eran 11 veces más altas que el cuerpo de la vértebra.9? Estas se diferenciaban también de las del acrocantosaurio porque formaban una «vela» de piel, mientras en las bajas espinas del acrocantosaurio se ataban poderosos músculos, como es el caso de los bisontes modernos, que formaban una joroba alta y gruesa.8? La función de estas espinas permanece desconocida, aunque probablemente pudieron servir para la comunicación, almacenamiento de grasa, o termorregulación. Todas las vértebras cervicales y dorsales tenían grandes depresiones (pleurocelas) a los lados, mientras las caudales se dotaban de unas más pequeñas. Esto es una característica más distintiva de los carcarodontosáuridos que de los alosáuridos.10?
Sin contar las vértebras, el acrocantosaurio poseía el típico esqueleto de los alosauroides. Era bípedo, con una cola larga y poderosa que balanceaba al cuerpo y la cabeza, manteniendo el centro de gravedad sobre las caderas. Sus brazos eran más cortos y robustos que los del alosaurio pero se asemejaban en otros aspectos al estar provistos de tres dedos con garras en cada mano. A diferencia de muchos dinosaurios veloces más pequeños, el fémur era más largo que la tibia y el metatarso,4?10? demostrando que el acrocantosaurio no era un rápido corredor.11? No es de sorprender que los huesos de las patas del acrocantosaurio eran más robustos que los de su pequeño pariente el alosaurio. Cada pie poseía cuatros dedos, de los cuales tres contactaban con el suelo y uno se mantenía al aire.